MARI CARMEN ARANA ANTOÑANA

Los partos entonces eran en casa, en Viana había dos practicantes que atendían en los partos. Su hermana mayor tuvo los hijos en casa y la atendió el practicante. En esa época no había seguimiento del embarazo, Mari Carmen recuerda que trabajó hasta el día que dio a luz. Después del parto solían dar caldo de gallina a la madre.