Durante su juventud no había empresas en Viana, únicamente había algunos oficios como el de los herreros o los carpinteros. Más tarde se instauraron varias fábricas: la galletera, la de muebles de Manuel Salcedo, una de sillas y otra de plástico. Al marchar el empresario de la fábrica de muebles, entre algunos trabajadores formaron una cooperativa para mantener la fábrica en activo. Algunos habitantes de Torrecillas se mudaron a Viana para trabajar en la fábrica de muebles y los primeros años eran llamados los “invasores”. Los trabajadores de Salcedo vivían en un barrio que se encontraba detrás de la gasolinera, esta zona se construyó cuando se instaló la fábrica.