En Viana había alguaciles, Guardas de campo, serenos y administrativos. El alguacil vigilaba el pueblo y podía hasta denunciar a los vecinos y vecinas. El bando oficial del Ayuntamiento se daba con el tambor y los bandos diarios se daban con una corneta. Dice que había un barrendero. Los serenos cantaban a las once de la noche la hora y el tiempo, ayudaban a los vecinos y vecinas si necesitaban algo y, además, tenían llaves de las casas.